Descripción
Las zeolitas naturales micronizadas pueden ayudar cuando los procesos
biológicos del cuerpo están funcionando mal, causando enfermedades
tales como:
Enfermedades de la piel
Las zeolitas naturales micronizadas pueden acelerar la curación de
heridas así como ayudar en el tratamiento de enfermedades infecciosas de
la piel (herpes), dermatitis inflamatoria (psoriasis) y alergias y
enfermedades de la piel (dermatitis, etc.). Además de estar tomando una
dosis oral, se recomienda la aplicación externa de polvo sobre la parte
abierta de la herida o enfermedad de la piel, unas pocas veces por día.
Enfermedades malignas
Durante y después de la quimioterapia las zeolitas naturales micronizadas pueden ayudar a:
Reducir las necesidades de analgésicos y narcóticos,
Reducir/remover líquido de la cavidad abdominal (hidropesía del peritoneo),
Mejorar los niveles de sedimentación,
Aumentar los niveles de hierro,
Aumentar el número de células sanguíneas,
Mejorar la salud general del paciente para facilitar el tratamiento de la quimioterapia
Paliar efectos secundarios tales como vómitos, náuseas
estomacales, pérdida del apetito, pérdida de peso, caída de
cabello, etc.,
Eliminar los hongos que aparecen a menudo durante la
quimioterapia en la boca y esófago y hace la recuperación más
difícil
Algunas enfermedades de los tejidos conectivos ?Las
zeolitas naturales micronizadas pueden ayudar a que las articulaciones
no produzcan dolores durante diferentes enfermedades relacionadas al
colágeno (artritis reumatoide, lupus eritematoso) y fibrosis.
Enfermedades de giro (la parte lumbar) ?Las
zeolitas naturales micronizadas pueden asistir significativamente en la
reducción del dolor durante el lumbago y la ciática.
Enfermedades gastrointestinales
Pueden prevenir contracciones espasmódicas (colitis ulcerosa) y
dolores. También ayuda regulando el movimiento intestinal
Pueden contribuir a normalizar la super secreción estomacal
Ayudan a regular la acidez estomacal
Diabetes
Pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre
Mejorando la microcirculación, puede disminuir las complicaciones de la diabetes
7. Enfermedades cardiovasculares
Pueden contribuir en la normalización de los latidos rítmicos
del corazón (extrasístole de desconocida etiología, taquicardia),
Pueden también asistir en la regulación de la presión sanguínea
Enfermedades de la sangre
? Pueden ayudar a la normalización de valores desordenados en enfermedades tales como anemia y glóbulos blancos.
Enfermedades del sistema nervioso y desórdenes neuromusculares
? Pueden ayudar a tranquilizar convulsiones, en la regulación de la
tensión de los músculos, en eliminar espasmos musculares y reflejos
patológicos, así como también asistir en la disminución de la frecuencia
e intensidad de los ataques epilépticos.
Enfermedades del hígado
? Contribuyen a la mejoría de la condición general y ayuda a alcanzar valores normales de los enzimas hepáticos (AST, ALT, yGT).
Clasificación de la IARC y FDA de las zeolitas naturales
Un hecho altamente positivo es que un producto basado en
zeolitas naturales es un producto 100% natural, 100% no tóxico y 100% no
contaminante . Como algunos minerales son cancerígenos (cuarzo,
arsénico, etc.), un paso importante en la posible utilización de las
zeolitas naturales en medicina humana fue investigar una posible
relación con el cáncer.
La investigación la dirigió la institución internacional IARC
(International Agency for Research on Cancer), la que después de
estudiar todos los antecedentes reunidos clasificó a las zeolitas
naturales (variedades de interés para Chile: clinoptilolita , heulandita y mordenita) en el Grupo 3: “no clasificables como cancerígenas”.
Este hecho abrió definitivamente la puerta para usar con seguridad zeolitas naturales en alimentación y medicina humana.
También es interesante destacar que la clinoptilolita está aprobada por la FDA como suplemento alimenticio.
Dosis y frecuencia de aplicación de zeolitas naturales para ingestión en forma preventiva y en forma curativa
En resumen, cuando las zeolitas naturales micronizadas son ingeridas
por un ser humano (y también en el caso de los animales, por cierto),
tienen tres efectos bien definidos, los que pueden resumirse en:
Efecto antioxidante : los radicales libres son
fijados a la estructura de las zeolitas mediante enlaces covalentes. Una
partícula micronizada de una zeolita natural posee innumerables
electrones para compartir y controlar los radicales libres,
Efecto antitoxicidad : las toxinas, por tratarse
de moléculas polares, son absorbidas y adsorbidas por las zeolitas
tanto en sus microporos como en la superficie de las partículas
micronizadas, dejando inactivo el mecanismo de acción de las toxinas,
mecanismo muchas veces cancerígeno,
Efecto anticancerígeno : las células
cancerígenas son más ácidas que las células normales. Las células
cancerígenas viven a un pH de alrededor de 7. Las células normales viven
a un pH de alrededor de 7.4. Las zeolitas naturales cuando entran en
contacto con una célula cancerígena le modifican su pH, subiéndolo a
alrededor de 7.4, debido a un fenómeno de intercambio catiónico, por lo
que la célula cancerígena finalmente muere.
La experiencia croata con miles de enfermos ha conducido a las
siguientes dosis de consumo de zeolitas naturales, para efecto curativo
de una variedad de enfermedades, tanto malignas como no malignas.
Las dosis diarias que deben ingerirse de zeolitas naturales
micronizadas varían entre 1.5 (3 capsulas) y 12 gramos ( 1 medida
de sachet)
Las enfermedades degenerativas con alto grado de avance, tales
como cáncer de diferente índole, con metástasis, se deben tratar
con una dosis diaria de 12 gramos (por ejemplo, cáncer al hígado,
cáncer al pulmón, cáncer intestinal, cáncer pancreático, etc.). Es
altamente recomendable dividir la dosis diaria en dosis más pequeñas lo
más cercanas posible entre ellas (se han reportado casos de curas
muy rápidas cuando se ingiere zeolitas micronizadas cada media
hora, excepto en el horario nocturno de descanso)
Se ha determinado también que cuando se ingiere una dosis
mínima de 4 gramos diarios de zeolitas naturales, los pacientes
(tanto sanos como enfermos) consiguen aumentar ostensiblemente su
status antioxidante (TAS, en inglés, “Total Antioxidant Status”).
Las enfermedades no malignas, tales como Parkinson, esclerosis
múltiple, lupus eritematoso, diabetes, hepatitis A, B y C, artritis
reumatoide, psoriasis, etc., deben tratarse con una dosis que
varía entre 1.5 y 9 gramos diarios, dependiendode lo avanzada que
esté la enfermedad.?Por cierto, en todos los casos es conveniente
repartir la dosis diaria en dosis a ingerir en horarios lo más
próximos posible entre ellos (cada media hora en casos más graves).
De todas formas, si no se sigue un método de ingestión muy seguida
debido a que la enfermedad no está muy avanzada o no es muy grave, se
recomienda tres dosis diarias: una dosis antes del desayuno (ideal media
hora antes), media hora antes del almuerzo (si se olvida, una hora
después del almuerzo) y una dosis media hora antes de la cena (o una
hora después de la cena).